viernes, 28 de enero de 2011

En el frasquito

Mirame bien. Porque a partir de ahora voy a hacerme mierda. Te vas y no lo soporto, ¿entendés? Por eso ahora me voy a convertir en una pila de soretes, acá, enfrente tuyo. Va a ser una especie de alquimia, pero de la destrucción humana. Todo eso que veías en mí, se va a caer a pedazos. Voy a hacerme bien mierda en tu cara. Porque esto es lo que sé. Sé hacer que me odies. Mirame bien. Esto es lo que va a pasar.

No es que lo haga por amor a los golpes. Odio los golpes, pero son lo que sé. Sé no ser tomada por lo que soy. Esto es lo que sé. Sé ser mierda. Sé bajarme los pantalones para que me embistan con botellas rotas. Sé vivir en un frasquito con agujeros para respirar. Ahí es donde crecí. Ahí es donde puedo dormir. Me muestran una cama. La pruebo. Entiendo. Pero yo sólo puedo dormir en el frasquito. Mirame porque voy a meterme de nuevo en el frasquito. Pero antes voy a hacer que vos misma quieras embutirme ahí. No es lo que quiero. Es lo que sé. Vos te vas y quiero tenerte en esa cama que me mostraron. Es una cama enorme. Vos sos enorme. Y todo eso es terrible. No sé salirme del frasquito. Lo hago un tiempo, pero vuelvo. Uno no cambia. Eso es lo que me digo cada vez que vuelvo al frasquito. Porque hice el intento; salí. Te busqué cuando salí. Y en realidad te busqué para estar otra vez adentro. Llena de golpes. Mirame. Esto es lo que sé.

Voy a hacer que me odies. Y lo voy a hacer porque no puedo odiarte. Voy a mostrarte toda mi retaguardia. Voy a deshacerme en tus narices y a intentar retenerte con lo peor de mí. Y voy a lograr que te vayas más rápido. Esto es lo que soy. El frasquito. Voy a mostrarte mi frasquito sucio. El olor a encierro. Te vas a ir. No porque quiera. Porque sé. Sé hacerte ir. Sé hacer que me odies. Aunque quiera hacer que me ames. Que me ames es imposible. Entonces odiame, para que yo pueda irme adonde sé. Al frasquito en el que crecí. De ahí vengo. Eso soy.

Mirame porque voy a hacerme mierda.
Esto es lo que sé.